
El paso del tiempo produce en nuestro cuerpo endurecimientos, pérdida de líquidos y de densidad ósea y disminución de la funcionalidad orgánica. El colágeno y la elastina que forman el cemento celular, se vuelven rígidos. Las arrugas aparecen. Con la mala alimentación y hábitos insanos, estos procesos se aceleran.
La ciencia sostiene que el envejecer se acelera por el estrés oxidativo, que los radicales libres, son los responsables de la degeneración del organismo. Y que el único factor que prolonga la vida es la restricción calórica y que al menos cien parámetros metabólicos mejoran con ella. Comer menos, pero con la garantía de tomar suficientes carbohidratos, proteínas, grasas, vitaminas y minerales, obra milagros en la salud y en la longevidad, aumentando considerablemente la vida máxima y retrasando enfermedades como el cáncer, alteraciones del sistema inmunitario, cataratas, diabetes, hipertensión, insuficiencia renal.
También los hábitos influyen. Los que tienen hábitos regulares como acostarse y levantarse a la misma hora cada día, comer moderadamente 3 veces al día siempre a la misma hora, hacer ejercicio moderado cada día, ingerir alcohol moderadamente… , superaban la media en 11 años.
Según la filosofía oriental, el envejecimiento es una Yanguización de las estructuras corporales, es decir, contracción y endurecimiento; y una Yinnización de las funciones, es decir, una ralentización.
Para contrarrestar este endurecimiento, deberían evitarse los alimentos endurecedores como la sal, el exceso de calcio, las aguas muy mineralizadas, las carnes rojas, los huevos, los embutidos y el tabaco. Además, deberían evitarse los alimentos muy Yin, como el azúcar, el alcohol, el exceso de frutas y los yogures, que pueden producir falta de resistencia y debilidad General.
CONSIDERACIONES A TENER EN CUENTA:
- Envejecer es un proceso fisiológico, no una enfermedad. Empieza a hacerse patente hacia el final del periodo de desarrollo y crecimiento, hacia los 25 años, y es durante la ancianidad cuando resaltan con claridad sus efectos. Con los años las células disminuyen la capacidad de neutralizar los radicales libres, viéndose deterioradas por ellos.
- Al ir cumpliendo años se pierden parte de las células que componen nuestro cuerpo, un 3% por década a partir de los 25 años. Esto quiere decir que a los 75 años hemos perdido más de la mitad de las células que teníamos a los 25. También se reduce la actividad metabólica de las células que quedan.
- Una insensibilidad a las cantidades de glucosa en sangre, vuelve a los mayores más susceptibles a la hipoglucemia e hiperglucemia temporales. Esta insensibilidad mejora sí se reduce el uso del azúcar y aumenta la cantidad de carbohidratos complejos y de fibra soluble en la dieta.
- En los hombres, el valor del colesterol en sangre llega a un máximo en la edad madura, para más tarde disminuir o mantenerse; no así en las mujeres, en ellas aumenta paulatinamente a partir de la menopausia. Para evitar riesgos cardiovasculares, se deberían disminuir todas las grasas saturadas y los alimentos ricos en colesterol.
- Con la edad aumenta la tensión arterial, por lo que es conveniente reducir la ingesta de sal y en muchos casos casi eliminarla dejando sólo una cantidad catalítica para estimular la función renal.
- Si se toman diuréticos de farmacia no vendría mal complementos de magnesio y alimentos ricos en potasio. Pero lo mejor sería sustituir los diuréticos por compresas de jengibre en los riñones, té de 3 años o Kukisha, caldo de algas o cola de caballo.
- Al disminuir la capacidad de eliminación renal es frecuente que se eleve el ácido úrico. Por ello es conveniente reducir el consumo de proteínas.
- Con la edad también disminuye la capacidad renal para eliminar ácidos metabólicos y los de las frutas ácidas (cítricos) y de otros alimentos (yogurt, vinagre). Para neutralizar los el organismo utiliza la reserva alcalina, que cuando es insuficiente se complementa con el calcio de los huesos con el consiguiente deterioro de estos.
- Con la edad disminuye la capacidad digestiva y hepática. Los alimentos deben ser de fácil digestión y en cantidades pequeñas evitando fritos y alimentos muy grasos.
- Con la edad se pierde flexibilidad sobre todo en las articulaciones. La ingestión de solanáceas (pimientos, patata, tomates y berenjenas) y tabaco, debe ser muy limitada en todos los mayores, especialmente los que tienen artritis o artrosis.
LO QUE SE DEBE EVITAR
- Excesos de Yang: aceleran el envejecimiento.
- Exceso de Yin: debilitan
- Carnes rojas y grasas saturadas.
- Leche, incluso desnatada.
- Hidratos de carbono de alto índice glucémico.
- Alcohol y tabaco.
- El exceso de alimentos acidificantes y ácidos.
- Los alimentos oxidados o muy cocinados como las barbacoas.
- Sal y condimentos.
- Hacer demasiada actividad física. Ver demasiada televisión u ordenador.
RECOMENDACIONES
- Come pocas calorías, lo cual no quiere decir que comas poca cantidad de alimentos, sino que éstos sean ricos en agua y fibra y pobres en grasa. Mantén el peso de un 10 a un 25% menos de lo establecido.
- Comer alimentos ricos en agua y poco concentrados (verduras, cereales cocidos, legumbres). Evita los alimentos concentrados y condimentados como los embutidos salados y picantes, los quesos fuertes, los huevos…
- Toma poca sal, y que sea sin refinar (contiene magnesio y oligoelementos).
- Tomar ácidos grasos insaturados para mejorar la flexibilidad del sistema cardiovascular. Por ejemplo, pescado azul dos veces a la semana.
- Tomar pocas proteínas concentradas (huevos, carnes, quesos, embutidos).
- Incluye en la dieta diaria hojas verdes como col, brócoli… Te ayudarán a mantener los huesos fuertes.
- Si a pesar de las indicaciones anteriores, te duelen los huesos, elimina totalmente los lácteos, las solanáceas y los endulzantes refinados y toma una pequeña cantidad de algas cada día, una cucharadita de polvo de cola de caballo y si fuera necesario, un complemento de cartílago de tiburón.
- Si tu circulación es lenta, condimenta tus comidas con cebolla y pequeñas cantidades de ajo y jengibre. Además, si la deficiencia circulatoria se manifiesta en la cabeza (pérdida de memoria, vértigos), tomar extracto de Ginkgo biloba (excepto si tienes o has tenido algún derrame cerebral).
- Si tienes calambres y contracturas de origen desconocido, evita las solanáceas (tomates, pimientos, patatas y berenjenas) y el azúcar; disminuye el consumo de frutas durante el día y evítalas por la noche; y toma una cucharadita pequeña de algas Hijiki o Arame cada día.
- Si tienes insomnio de causa desconocida, no duermas durante el día, y no cenes después de las 7 o las 8 de la tarde. Si además, acostumbras a levantarte a medianoche para ir al baño, no bebas líquidos ni tomes frutas antes de acostarte.
- Exponte a la luz del sol durante el día y duerme durante la noche a oscuras, para inducir la producción de Melatonina. Esta es una hormona producida por la glándula pineal que actúa como reloj biológico: regula los ciclos circadianos de la temperatura, la alternancia vigilia-sueño y el Cortesol.
- Entre el cielo y la tierra. (Harriet Beinfield, Efrem Korngold).
- El Equilibrio a través de la alimentación. (Olga Cuevas Fernández).
- Los secretos eternos de la salud. (Andreas Moritz).
- Salud Holística con la Macrobiótica.(Michio Kushi con Eduard Esko).
- Fundamentos de Bioenergética. (Carlos Nogueira Pérez).
- Tratado de sanación en el arte del soplo. (José luis Padilla Corral).
- El gran libro de la medicina china. (Li Ping).
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